lunes, 29 de abril de 2019


PERDIDOS

            Observo tus ojos, nublados por el alcohol, a través de los vitrales empañados. Las caricias con que recorriste mi desnudez me dejaron un vacío atrapado en recuerdos. Ya no sos quien eras, aquel hombre mío pródigo de placeres. Te perdés en mundos mareados por el whisky y dejaste de reconocerme el cuerpo con tus dedos, ahora temblorosos. Cualquier mujer es tuya porque no lo es ninguna. Mi nombre ya no significa nada. Nos perdiste.


viernes, 5 de abril de 2019


BIOGRAFÍA SENTIMENTAL

            Sentada en la escollera del Torreón, Laura es tres mujeres en una, incapaces de separarse sin romper su esencia. La cadencia rítmica de las olas livianas, seda los recuerdos ásperos. Habían sido tres hombres: del primero germinó un nombre y un aliento; su útero esperó el primer llanto y poco después, con esas manos pequeñas en su rostro, partió sin mirar atrás. Con él aprendió el sabor de la derrota. Del segundo recordaba sólo el centro de su pupila celeste, en la que no cabía ningún reflejo: aprendió lo que era el egoísmo. Del tercero, bebió el dolor de la violencia: su corazón de vértices en ángulo recto rasgaba las caricias de Laura sin piedad. Aprendió que no todos son capaces de dar amor.
            El océano, que nunca es el mismo, le enseña el sentido de la impermanencia, y en su acercarse y retirarse hacia la costa con monotonía incansable, no le permite olvidar los errores repetidos de los que aún no aprendió nada. 
            Las horas de la tarde pasan irregulares sobre las rocas y en su alma; el tiempo lento de la pena dobla la esquina y se transforma en un instante pequeño de goce y luego otro dolor largo y después, una alegría corta.
            Cuando el crepúsculo empieza a cubrirla, cae en la cuenta de que se va a dejar, más pronto o más temprano: una línea recta marcará el momento de su partida sin retorno.


lunes, 1 de abril de 2019


LA GOTITA

            La gota cae rebelándose sin ritmo, densa, con eco, lenta y luego rápida; seguramente formando un charquito alrededor del desagüe. Como no queriendo irse. La imagino desde mi cama y el sonido pequeño de día, se hace ruido viscoso, fantasmagórico en la oscuridad. No me deja dormir. Cierro los ojos y el impacto persistente del agua de la canilla contra la pileta me mantiene alerta. A veces, un silencio brusco me desorienta y la tensión de la espera se hace insoportable. Creo que se convirtió en agua inmóvil. Pero no. Súbitamente, una rápida cadena de sonidos llena el suspenso. Pienso que si la salpicadura tuviera ritmo definido, quizás un dos y uno, o tres y dos, haría las veces de acompañamiento, casi de canción de cuna, pero esta irregularidad me exaspera. Lucho contra mi propia bronca, pienso que aún despareja, es monótona, pero no logro convencerme. Tampoco me decido a ir y apretar la canilla.
           
            Todas las noches lo mismo. Es una lucha a oscuras entre un líquido que cae y un hombre que ya lleva días sin dormir.

Escritosdemiuniverso

Este blog es como ese universo que construyo día a día, con mis escritos y con los escritos de los demás para que nos enriquezcamos unos a otros. Siéntanse libres de publicar y comentar. Les ruego, sin embargo que lo hagan con el respeto y la cultura que distingue a un buen lector y escritor natural.



“Que otros se jacten de las páginas que han escrito; a mí me enorgullecen las que he leído…”
Jorge Luis Borges



Escritura

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esa pluma que todos hubiéramos querido tener entre nuestros dedos